A los pobladores de Nueva Zelanda no les parece tan rara, considerando que es el ave nacional de ese país. Pero lo cierto es que no es muy común, y a simple vista nos damos cuenta de sus peculiaridades. Es del tamaño de una gallina, y sus actividades son nocturnas. Debido a sus pequeñas alas no puede volar, aunque a pesar de su apariencia es bastante ágil. Su olfato desarrollado le permite encontrar gusanos e insectos para alimentarse, y cuando no encuentra este tipo de comida, se contenta con semillas y hojas. Actualmente, la cantidad de estos animales ha disminuido debido a los predadores, la cacería y el deterioro del hábitat, pero se está intentando mantenerlo a salvo de estos peligros.